Si tu prioridad es asegurar a los operarios en el área de trabajo, instalar una línea de vida es prioritario para evitar accidentes por riesgos de altura.
Las líneas de vida actúan como un dispositivo de alta seguridad, mientras que los trabajadores emplean sus labores de construcción, mantenimiento o montaje en distintos niveles de altura.
En este sentido, certificar una línea de vida comprende de realizar una evaluación de riesgos en el área de trabajo para su adecuada instalación, y en lo mayor posible inspeccionar el montaje de la línea de seguridad bajo la norma referencial UNE-EN 795.
Dicha norma, además especifica los requerimientos en cuanto a los métodos de ensayo e instalación de estos equipos, las instrucciones de fabricación y el marcado de los dispositivos de anclaje, destinados para ser utilizados como Equipos de Protección Individual (EPI).
La normativa que regula los sistemas anticaídas, como las líneas de vida consta de una serie de requisitos sumamente indispensables a la hora de garantizar las mejores condiciones de trabajo.
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Certificación de líneas de vida verticales y horizontales
Al realizar la instalación de la línea de vida, ya sea horizontal o vertical, estas deben cumplir con ciertos criterios según sus tipos, como lo pueden ser las líneas de vida flexibles, temporales o rígidas, pues solo de esta manera se podrá constatar su certificación.
La UNE-EN 795 C sobre las líneas de vida horizontal flexibles, especifica que estas deben tener terminales de tope, al igual que las líneas deben ser de cuerdas, bandas o cable metálico.
No obstante, el proveedor deberá especificar en las instrucciones la fuerza máxima permisible del dispositivo de seguridad, en función a los siguientes parámetros: número máximo de trabajadores para conectarse, la necesidad del uso de un absorbedor de energía y la altura mínima exigida.
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A diferencia de las flexibles, las líneas de vida horizontales rígidas precisan una acción completamente distinta, esto según indicaciones de la norma UNE-EN 795 D, puesto a que no generan flexión y técnicamente hablando se podría decir que las rígidas son mucho mejor, debido a que más personas pueden anclarse a ella generando incluso menos carga.
Estas están hechas con un raíl metálico de acero o aluminio, junto a un carro deslizante compatible con los respectivos puntos de anclajes. Además, estas deben contar con una resistencia superior a 10 kN según la dirección en la que se aplique.
Por otro lado, la UNE-EN 353 amplía la información sobre las líneas de vida destacando las regulaciones de las líneas de vida vertical con punto de anclaje flexibles y rígidas.
Tanto el apartado 1 como el 2 de la norma 353, se rigen bajo normativas obligatorias de cumplimiento dentro la Unión Europea. Estas se caracterizan por no exigir cálculos de la distancia libre de caída, al igual que están diseñadas por un cable de acero o en rieles, pero con una única diferencia entre ellas, una está compuesta por un conjunto de partes separables y otras por componentes desligados.
Conclusión
Cabe destacar, que con las líneas de vida se pueden evitar accidentes en alturas, siempre y cuando se cumplan con las pruebas exigidas según el tipo de línea a emplear, para así responder a la certificación de las mismas. Si buscas proveedores de las mejores líneas de vida en España, en Sicursafe garantizamos el cumplimiento de toda normativa vigente en materia de equipos para la prevención de riesgos laborales, prestando los servicios de instalación y verificación de los mismos, esto de la mano de un equipo de técnicos que velará por el correcto montaje y legitimación de los equipos de seguridad, como lo son las líneas de vida certificadas.